16 diciembre 2012

Recogida de aceituna

La recogida de aceituna en el Valler del Tiétar (Ávila) tiene lugar principalmente durante el mes de diciembre. La orografía del terreno obliga casi en todos los casos a la recolección manual bajo la técnica tradicional del vareo. En algunas zonas el cultivo de olivos en bancales impide la introducción de máquinas recolectoras en las fincas o incluso de maquinillos y remolques de tracción para el transporte de los sacos. Aunque se utilice un vibrador mecánico la tarea es muy pesada, más aún si tenemos en cuenta las duras condiciones climatológicas en esta época del año. Un trabajo duro como este ayuda a valorar aún más el aceite de oliva virgen extra resultante.
Cada olivo es vareado para que el fruto caiga. Debajo del árbol se coloca  una red que facilita su recogida.
Las aceitunas de depositan sobre "el pájaro", la criba de hierro. El trabajo manual ayuda a separar las hojas y ramas del fruto.

Las aceitunas van cayendo al saco, que se llevará inmediatamente a la almazara.

 
En San Esteban del Valle la campaña de recogida ha comenzado el 22 de noviembre. La recolecta ha sido más bien escasa dada la sequía de este año. En la página web del ayuntamiento hay más imágenes de la campaña 2012, y la recepción del fruto en la almazara.

08 diciembre 2012

Zacapa Room Madrid

El próximo lunes 10 de diciembre abrirá sus puertas en Madrid Zacapa Room, la primera la pop up store en España del ron guatemalteco Zacapa. El espacio, diseñado por el interiorista Ignacio García de Vinuesa y emplazado en la calle de José Ortega y Gasset nº 5, es una tienda temporal concebida como un auténtico espacio para aprender a degustar ron. Todos los días en horario ininterrumpido de 15:30 a 24:00 habrá degustaciones gratuitas, y todas las tardes a las 19:00 hotas catas guiadas previa reserva en reservas@zacaparoom.es. El acceso es libre y gratuito, y es una buena oportunidad para conocer más sobre la elaboración de esta bebida destilada, las peculiaridades del ron de Guatemala (elaborado con miel virgen de caña de azúcar, en lugar de melaza) y su delicioso potencial si los combinamos con chocolate. Isabel Maestre, Óscar Velasco y Paco Torreblanca han ideado tres exclusivos bombones para la ocasión, que también se podrán degustar hasta el 5 de enero en Zacapa Room. 
Zona de catas.
Ron Zacapa 23 y bombón "El oro de los mayas" de Isabel Maestre,
elaborado con chocolate Guanaja, fruta de la pasión y oro comestible.
Ron Zacapa 23 y Ron Zacapa XO.
 Mas información: Zacapa Room en Facebook.

04 diciembre 2012

Kulfi de pistacho en Lavapiés

El kulfi es un dulce helado típico de la India. Los puestos callejeros de kulfi forman parte del bullicio cotidiano en muchas calles de en Oriente Medio. Se elabora con leche azucarada y aromatizada que se ha dejado hervir a fuego lento hasta que ha reducido bastante su volumen. El proceso confiere al producto final una consitencia densa, por lo que la principal diferencia con nuestros tradicionales helados es que el kulfi es mucho más cremoso que  estos últimos.
He tomado mi primer kulfi en el restaurante Moharaj de Lavapiés, el barrio de Madrid con más restaurantes indios por metro cuadrado. La forma habitual de consumir el kulfi es forma de cono, con o sin palito, pero en Moharaj lo sirven en copa y casi a granel. Me ha encantado.
Kulfi de pistacho
Moharaj
C/ Ave María nº 26 - 28012 Madrid
Metro: L3 Lavapiés. L1 Antón Martín.

01 diciembre 2012

Bodegas Valdemar. Cata vertical

El pasado miércoles tuve la suerte de asistir a una vertical organizada por Bodegas Valdemar en Antigua Bodega de San Blas. Una cata vertical es, en palabras de Raquel Líquida, la "degustación de un mismo vino a lo largo de varias añadas, que no necesariamente tienen que ser seguidas". Así en la cata de Valdemar los asistentes degustamos vinos de La Rioja Alavesa Conde de Valdemar, la línea más clásica de la bodega, y vinos Inspiración Valdemar, la marca más joven que explora nuevas alternativas. La intención era conocer la historia y los rasgos diferenciales de estos vinos catando diferentes añadas, y descubrir su potencial en armonía con pinchos preparados para la ocasión. Cada pincho fue ideado en función de las características organolépticas  los vinos, para resaltar alguna peculiaridad.
Empezamos con Conde de Valdemar Blanco 2011 e Inspiración tempranillo Blanco 2011. El primero de ellos elaborado con uva de la variedad viura y fermentado en barrica (Bodegas Valdemar fue pionera en esto), el segundo un sorprendente vino blanco 100% uva tempranillo blanca. 
Conde de Valdemar Blanco 2011 e Inspiración tempranillo Blanco 2011, con brocheta de salmón con uvas y mahonesa de eneldo.
Continuamos con tintos Inspiración Valdemar 2008 y 2010, Inspiración edición limitada 2005 y 2008, e Inspiración Valdemar Maturana 2005 y 2008. Este último par,  bajo mi humilde opinión, el mejor de toda la velada: ambos carnosos, con cuerpo y retrogusto largo, características propias de la uva maturana. Las alternativas más interesantes que propone esta bodega alavesa parten del protagonismo de variedades de uva "nuevas" en el catálogo de la D.O.Ca Rioja que se cultivan desde hace siglos en la región, sin perder de vista su línea más clásica. Así, como broche final, degustamos Conde de Valdemar Gran Reserva 1985. 
Inspiración Valdemar 2008 y 2010, acompañado de zancarrón a la sidra con crujiente de patata gallega.
Inspiración edición limitada 2005 y 2008, Inspiración Valdemar Maturana 2005 y 2008.
Conde de Valdemar Gran Reserva 1985. Lo acompañamos con mousse de queso freco y chocolate de naranja sobre galleta de canela.
Lo más interesante de la cata fue el poder contar con la orientación de Ana Martínez Bujanda, directora de marketing de Bodegas Valdemar, representante de la sexta generación en la tradición bodeguera de la firma. Durante la cata nos transmitió el respeto por la tierra, la uva y la tradición que ha heredado. Y esto fue lo más positivo de la velada.
Tal vez sea porque en mi casa siempre hemos corrido la pitarra con todo el amor y el entusiasmo del mundo, por lo que cada vez presto más atención a lo que yo llamo "el lado humano del vino", esto es, la pasión con la que los bodegueros sacan adelante el producto y terminan amándolo. Y tal vez por esto me di cuenta que en una cata vertical no sólo se terminan apreciando los rasgos diferenciales del vino que catas, si no que de alguna manera también se conecta con la implicación de la bodega en sus vinos.