18 abril 2010

Bar Noviciado ¿la mejor oreja plancha de Madrid?

Madre mía...en cosa de dos días y de otra mano amiga he conocido otra meca madrileña del cañeo. He pasado multitud de veces por la puerta del Bar Noviciado y nunca se me había ocurrido a entrar. Sitio cutre donde los haya, con una extensa carta de raciones donde lo que primero destaca son los precios (baratos baratos y más en los tiempos que corren). No es un sitio apto para escrupulosos ni para los que odian salir de los bares con olor a fritanga y humo de los cigarros de los demás. Es el típico bar del centro con sus clientes fijos y otros de paso, la mayoría jóvenes y universitarios, y con ese aire especial de los bares viejos que mantienen los camareros carismáticos, de esos que lo han visto ya todo en la vida. La plancha está permanentemente funcionando, los camareros sudando la gota gorda, y la gente venga a pedir botellines y tercios. Y oreja y oreja. Y qué oreja. Nunca he comido una oreja a la plancha igual.

Y lo mejor es que nunca he comido una ración de oreja por 3,90€. Cuelgo una foto de la carta porque merece la pena ver cosas como Pincho de Tortilla a 1,20€ o HaNburguesas desde 2.50€.
Oreja rica, pero hay que dejarse las finuras y remilgos en casa. No en vano se la conoce por la "oreja del guarro". Oreja famosa con página en Facebook.

¡Gracias Denis & Popy!


Bar Noviciado
C/San Bernardo 51 (esq. Noviciado)

15 abril 2010

Pulpería Airiños...para comer de tapas!!

En nuestro afán por ir descubriendo bares madrileños donde comer o cenar con un par de cañas, hemos conquistado un nuevo hito de la mano de nuestra amiga Paloma. En la Pulpería Airiños sirven como tapa una generosa media ración de patatas, gambitas, embutidos, fritanga, o lo que se tercie..., todo de calidad y sobre todo en cantidad. La caña de cerveza no existe, son "dobles" en copa, y lamentablemente no puedo indicar el precio puesto que fuimos invitados. Estuvimos cuatro personas y esto fue lo que cenamos:
  • Con la 1ª ronda, camarones, queso y taquitos de jamón. No hay foto decente lo siento, cuando me quise dar cuenta ya nos habíamos comido todo, pero os aseguro que por la media ración de camarones que nos pusieron quedó más que amortizada la visita a este bar.
  • Con la 2ª cerveza, patatas alioli y surtido de fritos (empanadillitas, pimientos de padrón y rollitos de jamón).
  • En la 3ª ronda, patatas fritas y chistorra.

Los camareros no son especialmente simpáticos pero sí muy eficientes. Es difícil ver bares gallegos en Madrid que sean pulperías por lo que tenemos que volver para probar el pulpo (según carta, ración 20€). Además teniendo en cuenta que es gallego, y tras un breve vistazo a la carta, el sitio promete mucho en cuanto a raciones.

Pulpería Airiños. C/Marqués de Corbera 60.- Tlf.91 404 76 59. Metro La Elipa (justo al ladito del ascensor)

11 abril 2010

El Día del Pastel


  En el pueblo es tradicional celebrar el Domingo de Resurrección, en compañía de familia y amigos, con una buena merienda en el campo. La fiesta en sí se conoce como el día del pastel, a pesar de que la mayoría de las veces “el pastel” (bien dulce en forma de pequeña empanada o salado parecido al hornazo) brilla por su ausencia y la fiesta se traspasa al Sábado Santo, ya que somos muchos los que debemos regresar a la ciudad el mismo domingo. En otros muchos pueblos de la comarca también se celebra algo parecido aunque con otra denominaciones. Por ejemplo en Mombeltrán (La Villa) se denomina Día de la Monda, ya que así llaman a su "pastel", y lo celebran el Lunes de Pascua.

Lo que está claro es que ya sea el día que sea, con pastel o sin él, el caso es celebrar la alegría de la Pascua en el campo, comiendo y con amigos. Eso sí, esos son los tres requisitos imprescindibles: 

1.- En el campo. Dadas las posibilidades de chaparrón que suele haber en Semana Santa, lo ideal es buscar un sitio donde poder estar bajo techo si el tiempo no acompaña. Si además somos tiquismiquis y queremos todas las comodidades, lo ideal es una finca con casilla acondicionada a tal efecto. 

Esto son vistas y lo demás tontería.
2.- Comiendo. Lo suyo es preparar algo juntos, si uno cocina los demás serán pinches, y lo típico (ya que como digo el pastel ha sido relegado) es un calderillo de patatas y carne a la parrilla.
Calderillo in progress.
El calderillo son las también denominadas patatas a lo pobre, con pimientos secos, patatas viejas, pimentón de La Vera (comarca vecina aunque ya en Cáceres) y ajo y perejil majaos. Nosotros solemos echar algunas que otra costilla adobada (previamente cocida) para dar sabor. Era la comida típica de pastores y como tal, el toque definitivo lo da el aroma de la chasca, siendo imprescindible elaborarlas al fuego de leña. Las costillas se pueden pre-cocer al fogón de butano mientras de enciende el fuego, y así ahorramos tiempo. 

3.- En compañía. Realmente, es lo importante. Bueno, eso y el vino de pitarra (con moderación por supuesto) que también ayuda a alegrar el espíritu.

¡Cómo me gustan estas tradiciones populares!